Después de dos días en La Paz, abandonamos la ciudad y fuimos hacia el norte de Bolivia hasta llegar a la Isla del Sol, en el lago Titicaca. Además de ser una isla preciosa destaca por ser la cuna de la cultura inca, ya que cuenta la leyenda que Manco Capác y su mujer, Mama Ocllo, salieron de la roca sagrada para fundar la ciudad de Cusco.
Para llegar a la Isla del Sol, hay que tomar un autobús con dirección a Copacabana. Esta ciudad tiene embarcaderos desde donde salen las barquitas hasta la Isla del Sol.
Esta isla tiene una longitud de 9,6 km y 4,6 de ancho, como veis, una distancia muy asequible para recorrerla a pie. Y como dato curioso, es la isla más alta del mundo! No sabíamos mucho sobre este lugar antes de llegar, pero nos lo pasamos en grande por allí, aprendimos mucho sobre la cultura inca, hicimos excursiones por la montaña, disfrutamos de unas buenas cervecitas y por fin un buen pescado! Pero para llegar hasta aquí desde La Paz hay que seguir varios pasos…
El autobús sale desde La Paz y llega hasta San Pedro de Tiquina. Ahí hay que cruzar un estrecho, donde el bus se monta en un barco y la gente se baja y sube en otro. Esta es la forma más rápida de llegar a Copacabana.
Una vez en Copacabana, hay gente que se queda allí una o dos noches, nosotros preferimos ir directos a la Isla del Sol, pero antes compramos billetes de autobús para nuestro próximo destino, Puno, en una de las agencias que hay en la calle principal que va al puerto. Si se compra el billete en una de ellas se puede aprovechar para dejar las mochilas grandes y llevarse sólo una pequeña.
Con el billete ya comprado nos subimos a una de las barcas para llegar al sur de la isla, el precio de los tickets para cruzar desde Copacabana a la isla son los mismos en todos los sitios…los estuvimos comparando! También hay tickets para la Isla de la Luna, más pequeña y donde no hay alojamiento.
Este pequeño trayecto en barca y llegamos a la isla!! Nos decidimos por el sur porque leímos que había más alojamiento y que era más barato…pero después vimos que en el norte también hay y más o menos del mismo precio. Aunque sí es verdad que en el sur hay más vidilla y variedad de restaurantes y hostales.
Hay que tener en cuenta que en la isla conviven 3 comunidades: Challapampa al norte, Challa en el centro y Yamani al sur. Para acceder a cada zona donde se encuentra cada una de las comunidades hay que pagar una tasa de acceso. Así, al llegar al puerto de la zona sur lo primero que te exigen es pagar esta tasa.
Al desembarcar hay mucha gente ofreciéndote alojamiento, nosotros nos decidimos por una casita, que aunque era muy básica teníamos baño y unas vistas espectaculares del lago! Además, al ser tres (Ed, nuestro amigo Pepe y yo) nos salía muy barato! Se llama «Hostel Cabañas» y por 25€ dormimos los tres dos noches!
Descargamos el equipaje y esa misma tarde nos fuimos a dar una vuelta por la zona sur. Esta zona tiene muchas casitas y caminos para recorrer la zona, hay restaurantes y alguna que otra minitienda donde poder comprar agua o algo para comer, pero todo muy básico. También encontramos a mujeres y niñas vendiendo artesanía como jerseys de alpaca, pulseritas, manteles… todo a muy buen precio. Lástima que no nos cabía en las mochilas! Como la comida no es nada cara, nosotros cenamos en un restaurante, y hasta nos tomamos unas cervezas bolivianas!
Esta es la escalera del inca, que es lo primero que subes desde el puerto, y arriba se encuentra la Fuente de la Vida, donde por supuesto bebimos!!
Fue un día muy bonito, cenar al aire libre, con vistas al lago y viendo la puesta de sol...no tiene precio!
Al ponerse el sol, nos fue un poco complicado volver a nuestro hostal, ya que las calles tienen poquísima iluminación, es algo que hay que tener en cuenta y a nosotros se nos pasó! No teníamos linternas ni el móvil…así que despacito volvimos intentando no tropezar con ningún burro que viniera de frente!
Al día siguiente aunque amaneció nublado y con ganas de llover nos fuimos a recorrer la isla desde el sur hasta la zona norte, donde se encuentran las ruinas más importantes de la isla y la roca sagrada. Se suponía que había un sendero que va de una parte a la otra de la isla, pero no sé qué hicimos que en algún momento entre risas y fotos nos perdimos! Así que seguimos campo a través, entre bancales de lugareños hasta que volvimos a encontrar a lo lejos lo que parecía un sendero!
Tardamos unas 3 horas en llegar a la zona norte donde hay playas y se puede acampar si se quiere ahorrar todavía más dinero.
Ed con dos nuevos amigos |
Una vez llegamos al puerto de la zona norte vimos los horarios para ver la posibilidad de volver en barco al sur después de visitar las ruinas, pero no hay muchas combinaciones para volver, así que finalmente decidimos ir a nuestro aire y volver otra vez a pie!
Fuimos primero al Museo del Oro, pero estaba cerrado… así que continuamos hasta la zona arqueológica donde un señor que vendía llaveros y pulseras nos ofreció sus servicios como guía, y por supuesto lo contratamos! Por menos de 3€ cada uno nos contó todo lo que sabía sobre esas ruinas, y el nacimiento de la cultura inca. Merece la pena que alguien de allí nos cuente su historia, además de poder preguntarle dudas y recomendaciones de la zona!
Frente a la Roca Sagrada (Ed haciendo el tigre jajaja) |
Mesa ceremonial de sacrificios |
Para la vuelta sí encontramos el camino oficial, el camino del inca, que nos llevó directos al sur y sin tener que saltar por los cultivos! Hay que pagar las tasas de las que hemos hablado antes, al llegar a cada zona, hay una caseta donde algún lugareño nos pide pagar la «entrada» para cruzar o visitar la zona.
La vuelta también fue unas 3 horas y poco, y al llegar paramos a cenar una trucha del lago Titicaca, que aunque ya la habíamos probado en Tiwanaku esta estaba mucho más buena! Además, tuvimos también otro bonito atardecer entre las nubes para despedirnos de Bolivia, pero no del Lago Titicaca!!
Al día siguiente volvimos a Copacabana y nos subimos a un autobús rumbo a Puno!! Tocaba sellar el pasaporte al entrar en Perú, y allí nos aguardaba una experiencia única, dormir en el mítico buque Yavari!!
Como consejo , si vais hasta la isla del sol y sólo pensáis pasar el día o una noche, lo mejor es dejar el equipaje en Copacabana, en cualquier agencia donde se compre el billete para seguir el viaje, y llevar sólo lo imprescindible. Se puede desembarcar en el sur de la isla, recorrerla y llegar al norte para dormir, o volver a Copacabana si se ha contratado una barca, ya que los horarios por la tarde son muy malos, de todas formas se puede consultar allí para asegurarse.
Si se dispone de más tiempo, es un lugar precioso par dedicarle al menos dos días y disfrutar de la tranquilidad, de un lugar sin más tráfico que el de los burros u ovejas!! A mí 2 noches se me quedó corto!!